Hacía mucho tiempo que tenía una tarea pendiente: Hacer serigrafía. Agotado un poco de tanto trabajo en el medio digital, sentí la necesidad de volver a mancharme las manos con la tinta, asi que, decidí realizar un corto pero muy buen curso de Serigrafía.
Se nos pidió improvisar algunas imágenes que nos gustaría imprimir y surgieron estas caras de trazos simples a las que llame Serigrafaces. Las siguientes impresiones surgieron entonces tras experimentación con esta potente técnica y se realizaron tanto en papel como sobre tela y en algunos casos combinando dos colores.